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McLaren logra dominar la clasificación en Holanda.
Verstappen queda relegado y Norris pierde la pole por milésimas.
Con una vuelta impecable y precisión de manual, Oscar Piastri se adjudicó la pole position en Zandvoort. El piloto de McLaren detuvo el cronómetro en 1:08,662 minutos, un registro que no solo le aseguró la primera posición, sino que además se convirtió en récord de pista.
El australiano demostró temple y control absoluto en un circuito que exige concentración al límite. Lando Norris, su compañero de equipo, había dominado toda la sesión, pero cedió la cima por apenas 0,012 segundos, una diferencia mínima que cambió el guion de la clasificación.
En contraste, Max Verstappen, ídolo local y habitual protagonista, quedó relegado a la segunda fila. Desde esa posición, tendrá que replantear su estrategia de carrera para recuperar terreno.
Piastri mostró que, bajo presión, responde con frialdad. Su actuación lo coloca como serio contendiente al título mundial, enviando un mensaje claro: no basta con la constancia, se necesita audacia en los momentos críticos.
El equipo McLaren celebró con orgullo, consciente de que este resultado reafirma su regreso a la élite competitiva. En palabras de analistas deportivos, “Zandvoort presenció un duelo de nervios, y Piastri lo ganó con madurez”.
La clasificación en Holanda dejó más que tiempos: dejó la certeza de que el campeonato no tiene dueño fijo. Piastri está listo para escribir su propio capítulo en la Fórmula 1.
