¡Síguenos!
TwittearVisitas: 160
• México rechaza medidas unilaterales y exige respeto comercial.
• Se busca acuerdo antes del 1° de agosto para proteger empleos.
En respuesta a la amenaza de Donald Trump de imponer aranceles del 30%, el Gobierno de México no perdió el tiempo. El 11 de julio, una delegación integrada por cinco secretarías federales viajó a Washington para establecer una mesa permanente de diálogo bilateral.
La iniciativa fue convocada por el Departamento de Estado de EE.UU., y reunió a actores clave de ambas naciones: desde comercio y seguridad hasta energía y relaciones exteriores.
Durante la reunión, se advirtió que EE.UU. enviará cartas a distintos países, anunciando nuevas tarifas comerciales vigentes desde el 1° de agosto. México dejó clara su postura: “No aceptamos un trato injusto”, señalaron los representantes.
Entre los temas abordados estuvieron la seguridad en la frontera, la migración, la gestión del agua y la relación económica bilateral. Pero el foco fue claro: evitar los aranceles y proteger el empleo.
Ambas partes acordaron que la primera gran tarea de esta mesa será proponer una salida que frene la imposición de tarifas. Para México, haber logrado este espacio de negociación antes de agosto es una victoria táctica.
El gobierno confía en que el diálogo abrirá oportunidades para resolver tensiones comerciales, sin perjudicar a las industrias de ninguno de los dos países.