Justus Villareal explicó que la hidroeléctrica funciona por medio de un proceso físico y no químico lo que garantiza que el agua conserve su estado natural:

“”El agua no se modifica, porqué esto es un proceso físico, no es un proceso químico, la diferencia es que en el proceso químico se necesita hacer un cambio a la propiedad de un combustible, por ejemplo, combustión del gas, del diésel, en este caso una hidroeléctrica no hace un cambio de combustión químico a las propiedades del agua, simplemente aprovecha su fuerza para mover una turbina y regresa el agua en sus mismas condiciones”.

Entrevistado durante la inauguración de obras públicas en las comunidades de Palulca y Mixtla, Veracruz  a cargo de la empresa, explicó que a petición de los ciudadanos preocupados por lo que miembros de organizaciones civiles han dicho sobre la construcción de la hidroeléctrica, fueron llevados para que conozcan el funcionamiento de la que ya opera en Zongolica:

“A eso vinieron varias comunidades de Puebla a desmentirse a desengañarse de varias organizaciones que están por la zona, que simplemente están diciendo varias cosas falsas, por ejemplo: que el río se seca, que se contamina el agua o que hay radiación, que los cables y la hidroeléctrica iba a crear cánceres o que iba a secar los árboles y los cultivos, hoy se dieron cuenta que el área está verde, la gente está contenta, es un proyecto muy positivo, un proyecto de vida con toda el área reforestada que hemos hecho y recuperada la biodiversidad”

Detalló que se les mostraron las pruebas de estudios de aguas que realizó la Secretaría de Energía (SENER) en la hidroeléctrica y que fueron avalados por el Tecnológico de Zongolica, además de que pudieron comprobar que no existen daños ecológicos a cuatro años de la operación en la región.

Aunque activistas han acusado que la construcción de este tipo de proyectos representan ataques a los usos y costumbres de las comunidades indígenas de la región, esto también resulta falso, pues la empresa se vincula con los habitantes respetando sus tradiciones bajo una política empresarial que denominan “buen vecino”. 

 Bajo este esquema de colaboración la empresa en coordinación con autoridades de los tres órdenes de gobierno y la sociedad lograron la construcción de un camino en la comunidad de Palulca y el puente Aticpac pertenecientes al municipio de Texhuacan en el estado de Veracruz, donde se beneficiarán a más de 300 habitantes de esa región veracruzana, que tuvo como marco una ceremonia prehispánica.