INAH supervisa el trazo para proteger la zona declarada Patrimonio Mundial.

Armenta promete respeto total al marco legal y cultural.

Puebla está cada vez más cerca de contar con un sistema de transporte urbano diferente, elevado… y pensado a futuro. El gobernador Alejandro Armenta anunció que el proyecto del Cablebús fue aprobado y actualmente está bajo análisis técnico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). La clave está en el trazo: no debe tocar ni un ladrillo del Centro Histórico.

Desde que inició su administración, Armenta ha sido cauto: no quiso anticiparse sin el respaldo de las autoridades culturales. “No hay caprichos”, dijo. “Vamos con el INAH paso a paso. Si hay algo que ajustar, se ajusta”.

El proyecto contempla tres líneas, pero la columna vertebral será la que conecte La Resurrección con Angelópolis, uniendo puntos estratégicos del oriente y sur de la ciudad. Además de aliviar el tráfico, busca ser una alternativa sustentable para miles de personas que todos los días enfrentan traslados complejos.

El INAH, por su parte, dejó claro que las estructuras del Cablebús deberán mantenerse fuera del perímetro de la Zona de Monumentos Históricos, famosa por sus iglesias barrocas, fachadas de azulejos y calles con siglos de historia. En un comunicado, informó que continúan las mesas técnicas junto con el Centro INAH Puebla y la Secretaría de Cultura, no solo para evaluar, sino para normar y proteger.

La resolución técnica definitiva llegará pronto. Y aunque el proceso es lento, la verdad es que cuando se trata de patrimonio, más vale hacerlo bien que rápido.