Cruz Azul se levantó de un golpe anímico casi imposible de superar. Los cruzazulinos tenían la oportunidad de anotar el gol de la victoria por medio de un penalti tras un reñido primer tiempo.

Gabriel Peñalba fue el encargado, el refuerzo cementero se paró detrás de la bola, viendo fijamente a Moisés Muñoz. Se armó de valor a tirar, pero la figura del arquero chiapaneco desvío la bola.

A pesar de tal situación, Cruz Azul no bajó los brazos. Por vía de Ángel Mena, los capitalinos se fueron arriba en el marcador de una espectacular forma. Mena tomó la bola fuera del área, vio a Muñoz adelantado, apuntó e hizo un tiro magistral con una fuerza absoluta que venció al arquero de Chiapas.

La emoción estaba en pleno auge; bastaron solamente dos minutos más para que el segundo cayera. Joao Rojas hizo una diagonal que acabó en gol. El tiro “techó” por completo a Muñoz.

Cruz Azul seguía insistiendo, quería darle a su afición una buena noche de futbol. Chiapas perdió el estribo, la idea se esfumó a pesar de haber dado un buen primer tiempo.

Los pupilos de Paco Jémez consiguieron un respiro; una victoria siempre sabe bien y los jugadores cruzazulinos hicieron notar esa felicidad al terminar el encuentro.