La aparición anoche del entrenador Steve Kerr, para nada confirma que dirigirá los entrenamientos de Warriors de Golden State en las finales de la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA).

Desde que el 23 de abril anunció el equipo la ausencia indefinida del estratega, fue para el encuentro de anoche que pudo Kerr realizar su primer viaje con el conjunto y vaya en qué momento.

Los llamados Dubs ganaron 129-115 a domicilio a Spurs de San Antonio, para alcanzar la tercera barrida en estos playoffs, llegar a 12 victorias y conseguir el tercer título consecutivo en la Conferencia Oeste.

Steve estuvo ahí, en la arena de San Antonio, para impulsar moralmente a su equipo, porque las riendas tácticas están a cargo de su auxiliar Mike Brown, quien mantiene al equipo en la misma línea del triunfo.

Kerr está convaleciente de su columna vertebral, la cual pasó por cirugía hace dos años y ahora le da fuerte dolores, pero se le vio obviamente feliz durante la ceremonia de premiación, aunque también se le observó delgado, un poco más de lo que es su complexión natural.

"Sólo el día a día", respondió Kerr anoche a un reportero de ESPN, quien al consultar otras fuentes detalló que todavía siente un dolor significativo en su espalda y que su viaje y presencia con Warriors no significa un progreso en su alivio.