¡Síguenos!En los últimos años se ha popularizado y se ha hecho indispensable el uso del término “sicario digital”, para señalar a personajes, todos abyectos, en todos los casos con intenciones aviesas y – en la mayoría de las ocasiones–, disfrazados o anónimos. En la web es muy sencillo encontrar muchas definiciones, pero una que es contundente es aquella que describe al “sicario digital” como esa persona que en las redes sociales tiene “la finalidad de dañar, violentar, despolitizar o tergiversar la imagen pública o política de las personas”, aunque también atacan a personas del ámbito privado.
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Los “sicarios digitales” no opinan, no son periodistas que expresen una opinión en cualquier sentido y que sustenten su trabajo en datos y argumentos; no son personas honorables y están a años luz de ejercer la constitucional e inalienable Libertad de Expresión.
Desde hace años, en Puebla la cuenta en redes, específicamente en X (antes Twitter), de un personaje que se disfraza –es literal, no es metáfora– con peluca de rastras, con lentes caricaturescos y que, cobijado en un supuesto “humor ácido”, comenzó una espiral descendente, hasta las cloacas mismas, para atacar, tergiversar datos, ofender a personas y personajes públicos y del ámbito privado, lo mismo que encabezar, apoyado por otras cuentas igual de perversas, campañas negras.
“Bruce Julius” es un ser que vive en una letrina desde la que se ha dejado ver y ha ido alternando su vida en las redes sociales con la persona detrás del disfraz: Gustavo García, quien se autodenomina asesor o, algo así, en “manejo de campañas e imagen pública”.
Se trata de un personaje que sirvió muchos años a Fernando Luis Manzanilla Prieto, la mente de la primera etapa del morenovallismo y el asesor estrella, por muchos años, de Moisés Ignacio Mier Velazco, el senador del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), cuyo comportamiento y desempeño públicos están más cerca de la ultraderecha que de la izquierda democrática.
Nacho Mier, el fallido aspirante a la gubernatura, coloca a sus hijos en cargos, ha sido señalado, con abundantes referencias mediáticas, por tener negocios al amparo del poder y así varios temas.
“Bruce Julius”, alias Gustavo García, o viceversa, fue desde el principio de la fracasada aspiración de Mier, uno de los dedos que apretaban gatillos contra los adversarios de MoreNacho –el apodo electoral de Moisés.
El personaje de las rastras y la caricaturesca cara ha iniciado o impulsado campañas de odio, de misoginia, de linchamiento y de persecución contra muchas personas. Su soez lenguaje y su ausencia de inteligencia y datos son el sello de su casa.
“Eres un tipo misógino, generas odio hacia las mujeres en tus comentarios. Pones a andar a cuentas ‘bot’ para darle fuerza a tus ofensas y violencias. Hay videos de toda la violencia que generas, solo hace falta ver tus posteos en X. No es gracioso. Es violencia. No es libertad de expresión cuando generas más odio. Ahí tienes a las Diputadas @NormaPimentelMx @NoraMEscamilla que no dejas en paz #CiberAcoso”, escribió el martes la activista y especialista en este tema, Edurne Ochoa en su cuenta de X, a propósito del brete en que se encuentra ese personaje, por su asociación a otra cuenta también del “sicariato digital”.
“Bruce Julius”, alias Gustavo García, o viceversa, a quien se conoce como dueño del portal AxolotlMEDIA, también suele saltar en su cuenta de Twitter, selectivamente, contra y a favor de personajes, siempre con faltas de ortografía y pésima sintaxis:
“Que risa me dan ahora los lame culos de @eduardorivera01 que atacaban a @RiveraVivanco_ por una buena lana de @MBarbosaMX muchos hoy, ya atacan a Lalito y le besan la mano a Armenta!!” (7 de octubre de 2024).
También, de cuando en cuando, niega sus públicas relaciones, suponemos que con ánimo de despistar sobre sus patrocinadores y a la vez confiesa actos “sicariodigitales”:
“Imagínese si Nacho al que le eche sus porras jamás me peló, Armenta al que jamás le he hecho gracia, menos!!!” (5 de diciembre de 2023).
Cobijado en el disfraz, a medias, pues hace mucho tiempo que se sabe de la persona que ha estado detrás, ha sido especialmente agresivo y abyecto para referirse a mujeres.
Este martes, sin decoro y con absoluta incongruencia, publicó una carta abierta pidiendo “respeto” a su “libertad”.
¿A cuál, a la de difamar y dañar, violentar, despolitizar, o tergiversar la imagen pública o política de las personas? Como él lo hace, busca ahora disfrazar su actividad que encaja en la definición de “sicariato digital”, para aludir a la Libertad de Expresión, esa que ha pisoteado tantas veces, desde la mirada fascista con que él y sus aliados ven al mundo y, particularmente, a Puebla.
Un hecho mayor preocupa: con el protagonismo, acciones constitutivas de delitos digitales, “Bruce Julius”, alias Gustavo García, o viceversa, ha puesto nuevamente a la vista una estrategia de Moisés Ignacio Mier Velazco, una añeja para menoscabar al gobierno de quien genuinamente le ganó en seis encuestas para ser el candidato de Morena a la gubernatura de Puebla y luego, con el porcentaje histórico más alto, convertirse en mandatario constitucional.
Los mensajeros de Nacho son tan obvios.
Son tan abyectos.
Son tan elementales.